- Queso de máquina 450 g
- aceite c/n
- nueces tostadas y procesadas 100 g
- pimentón dulce 2 cdas
- orégano 3 cdas
- queso sardo 200 g
- queso provolone 200 g
- roquefort 200 g
- Dip:
- roquefort 200 g
- crema de leche 200 cc
- mayonesa 150g
Dividir el queso de máquina, sin cáscara, en tres partes iguales.
Pincelar los laterales con aceite.
Pasar una parte por nueces y/o almendras procesadas.
La segunda pasarla por el pimentón.
Y la tercera por el orégano.
Cortar en láminas finas cada uno.
Acomodarlas superponiéndolas un poquito en la tabla.
Quitar la cáscara al queso sardo y cortarlo en láminas finas.
Acomodarlo en forma escalonada.
Sin retirar la cáscara del provolone cortarlo en fetas de 5 mm.
Cortar el roquefort en láminas.
Acomodar estos quesos en la tabla también.
Dip: pisar el queso roquefort hasta obtener una pasta.
Añadir la crema y la mayonesa.
Mezclar bien y colocar en un recipiente o cazuela.
Acompañar la tabla de quesos.
Opcionales: se pueden sumar orejones de durazno, pasas de uva, frutos secos y frutillas.